Todo comenzó una mañana de sabado que salí temprano de casa y me fui a la casa de cierta mujer, se encontraba dormida, eran casi las 7:30 espere unos minutos mientras le marqué varias veces y no contestaba, me regresé al carro para poder guardarme del frío de la calle, pero en una de esas intentos de llamada me contestó, me dijo que abriera la puerta y entre sigilosamente puesto que traigo llave la casa y dejo abierta la de su cuarto
Me la encontré en tanga de color azul un sostén rojo y una blusa manera de pijama, se miraba muy excitante la situación me encontraba ya un poco cachondo, caliente y aproveché la oportunidad para meterme entre sus cobijas de su cama, su lecho íntimo en el que disfrute placenteramente el calor humano de su cuerpo casi desnudo, puede sentir la tibieza de su cuerpo la suavidad de sus piernas y sus nalgas, la calentura de su vagina más que tibia, apenas cubierta con esa tanga de color azul sin costuras deseosa también de sentir mi pene y a la hora de acostarme frente a ella y tocar sus pechos sobre el sostén puede notar que subió la pierna encima de mí invitándome a recorrer el preciado tesoro con mi mano y mi pito ya erecto, que guarde entre esas piernas.
Inmediatamente me bajé los pantalones saliendo aquel pito deseoso de entrar en la intimidad profunda de su cavidad vaginal, estaba yo exitado y ella también, pude notar como los vaivenes de su vientre sobre mi pene hacían que con mi mano izquierda abriera un poco sus calzones y pudiera entrar y rozar el clítoris con la cabecita de mi pene y poco a poco con sus vaivenes y empujones entró me sentí de lo más delicioso estar en la humedad es vagina estar empujando poco a poco así estuvimos un momento hasta que por fin me vine vacío todo mi líquido interior en su vagina empapando la también ella con un orgasmo intenso ese orgasmo que aún siento cómo palpitaba su vagina en mi pene dentro.
Es una delicia haber estado muy de mañana en su casa me repuse me limpié y me vestí seguí acostado hasta que ella dijo que se iba a levantar para cambiarse de calzones porque estaban todos empapados de mi semen y de sus líquidos estuvimos unos segundos así reposando la fornicación que habíamos hecho y la lujuria que nuestros instintos nos habían dado qué rico fue cogerte en tu propia cama donde duermes sola desde mas de 20 años sin un hombre que se haya metido entre tus sabanas y fui yo que me meti hasta en sus entrañas, delicioso y exitante. muy rico. un rapidin mañanero
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